martes, 13 de abril de 2010

Pequeña crónica del primer día de curro.

Mi alarma suena a las 7:00. Me levanto a las 7:15. Me ducho, me visto, me seco el pelo y compruebo, satisfecha, que mi maldito herpes bucal ha desaparecido por completo. Doy las gracias a Compeed por ahorrarme 500 preguntas infantiles sobre mi herida en la boca. Arranco mi Skodi. Finalmente salgo algo más tarde de lo que tenía previsto. Llueve un poco. En la cadena SER dicen que Francino acaba de tener un hijo y que por eso está de baja por paternidad. Las noticias son un coñazo pero no sé porqué sigo con la misma emisora. Conduzco durante casi una hora. Llego al cole, finalmente, a la hora que quería llegar. Saludo a algunos compañeros. No doy besos porque decido alertarles sobre mi casi extinguido herpes bucal. La administrativa me da un beso haciendo caso omiso de mi recomendación sanitaria. "Au vaaaa!! Que jo sóc de poble!!!". Muy maja esta administrativa. Y muy valiente. La directora no ha llegado. Conozco al especialista de inglés. Me dice que se ha pasado 12 años (12) en Escocia. Conozco a una profesora con aparatos bucales. No recuerdo su nombre pero era muy simpática. Vuelvo a ver algunos de los profes que ya conocí en mi visita antes de incorporarme. Suena el timbre de las 9. Me voy a P5. Me toca el grupo de las liebres. Hay una veladora en el aula. Manuel está un poco "pa llá" y la necesita. Los críos son movidos pero el factor curiosidad juega en mi favor. Me presento. Se presentan. Pido silencio. No lo consigo. Me invento un juego absurdo y consigo silencio. Me los llevo al gimnasio. Jugamos un rato. Una niña me dice que está cansada. Otra ha sufrido un pequeño choque con Manu y dice estar muy perjudicada. Seguimos jugando. Nos volvemos a clase. Me voy a la clase de las ardillas. Mucho más tranquilas que las liebres. No hay veladora ni mucho psicópata suelto. Tienen nombres muy raros pero ninguno árabe. Hay niñas que me dicen el cuento ese de "eres muy guapa". Los críos tienen estrategias muy sucias para doblegarte. Juanmi es uno de los cracks del grupo. Pau es otro figura y Xavi se entretiene lavándose las manos en el único charco de la pista de fútbol. Jugamos. Volvemos a clase. Es la hora del patio. Me voy a la sala de profes. Celebran un cumpleaños y hay pastelitos. Los hay dulces y salados. Sólo me como un trozo de chocolate y un minibocata de salchichón. Tenía más hambre pero me daba corte. Soy jilipollas. Mi homólogo de educación física se interesa por mi jornada. "Bien! voy tirando!" La directora aparece y parece un pelín (pelín minúsculo) disgustada por no haberme visto antes de empezar la jornada. Hablamos y parece que no tiene importancia. Se acaba el patio. Me voy a la clase de 3º A. Muy majos. Majísimos. Su tutora está enferma y su substituta aparece por el aula un poco disgustada. Nos los llevamos a informática. Improvisamos un poco. Los críos siguen siendo majos. Acaba su sesión y me voy a la clase de 6º A. Los grupos de sexto son difíciles. En el aula de informática me esperan junto a el otro profe de EF. Me presento. Se presentan. Algunos me vacilan. Lo intentan. Me veo obligada a pegar algunos de mis cortes a lo teniente O'Neal. Un último alumno entra tarde al aula. Se llama Roger y acaba de tenérselas con un profe por llamarle marica. Lleva camiseta sin mangas. Un poco macarrilla. Tiene los ojos bonitos. Verdosos. Es guapo aunque no goza aún de mucha estatura. Se acaban las presentaciones y él, sin su turno, se siente ofencido y no quiere presentarse. Me veo obligada a echar un maldito discurso sobre el respeto y que estoy aquí para ayudarles. Les digo que no quiero saber nada de lo que hayan hecho antes. Les digo que tienen la oportunidad de mostrarme lo mejor que tienen. Se callan. ¿He sido un poco O'Neal? Los chavales levantan la mano y les ayudo. Mi compañero hace lo mismo. Roger me pide ayuda. Le ayudo. Me mira a los ojos y es cuando veo que los tiene muy bonitos. Le corrijo algunas faltas de ortografía. Tiene muchas. Me siento con él. No podemos acabar el trabajo pero le digo que el próximo día lo retomamos. Me vuelve a mirar a los ojos. Está tranquilo. Todos apagan el ordenador y se van. Mi compañero me pregunta por Roger. Me pregunta si he tenido algún problema con él. Le digo que no y que, de hecho, se ha mostrado muy educado y tranquilo. Mi compañero me dice que le ha gustado mi presentación. " És molt bo que et vegin al teu lloc. Et respectaran!" Es la una. No tengo clase por la tarde. Me despido de la directora y salgo del cole más contenta que unas pascuas.



"¡Eso! Tú confíate que te vas a cagar..."

2 comentarios:

  1. Molt fort! aunque más que en teniente O´neal te veo en plan sargenta de hierro

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  2. Bueno ya sé que no estoy tan buena como Demi Moore...

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